Científicos de EEUU frabrican el primer ADN que abre la puerta a la vida artificial
Un equipo internacional de científicos encabezado por Jef Boeke,
director del Centro Médico Langone del Instituto para Sistemas Genéticos
de la Universidad de Nueva York, en Estados Unidos, ha sintetizado el
primer cromosoma funcional en la levadura, un paso importante en el
campo emergente de la biología sintética y el diseño de microorganismos
para producir nuevos medicamentos, materias primas para alimentos y
biocombustibles.
En los últimos cinco años, los científicos han construido cromosomas
bacterianos y ADN viral, pero éste es el primer informe de un cromosoma
eucariota completo, la estructura filiforme que transporta los genes en
el núcleo de todas las células animales y vegetales, construido desde
cero. Los investigadores dicen que el esfuerzo global de su equipo
también marca uno de los avances más significativos en la genética de la
levadura desde 1996, cuando los científicos trazaron todo el código del
ADN de la levadura o mapa genético.
"Nuestra investigación mueve la aguja en la biología sintética de la
teoría a la realidad", afirma el doctor Boeke, pionero en biología
sintética, que recientemente se unió al Centro Langone desde la
Universidad de Johns Hopkins, en Estados Unidos. "Este trabajo
representa el paso más grande en un esfuerzo internacional para
construir el genoma completo de la levadura sintética", agrega este
experto.
"Es el cromosoma más ampliamente alterado jamás construido. Pero el hito
que realmente cuenta es la integración en una célula de levadura viva.
Hemos demostrado que las células de levadura que llevan este cromosoma
sintético son muy normales. Se comportan de manera casi idéntica a las
células de levaduras salvajes, sólo que hoy poseen nuevas funciones y
pueden hacer cosas que la levadura salvaje no es capaz", resalta.
En la edición digital de este jueves de la revista 'Science', el equipo
técnico describe cómo, usando un diseño asistido por ordenador,
construyó un cromosoma en pleno funcionamiento, al que llamó 'synIII', y
lo incorporó con éxito en la levadura de cerveza, conocida
científicamente como 'Saccharomyces cerevisiae'.
El esfuerzo de siete años por construir el cromosoma 'synIII' unió unos
273.871 pares de bases de ADN, una longitud más corta que su homólogo de
la levadura nativa, que tiene 316.667 pares de bases. Boeke y su equipo
realizaron más de 500 modificaciones en su base genética, eliminando
secciones de repetición de unos 47.841 pares de bases de ADN que se
consideran innecesarios para la reproducción y el crecimiento de
cromosomas.
ADN basura
También quitaron lo que se denomina popularmente ADN basura, incluyendo
pares de bases que se sabe que no codifican ninguna proteína en
particular, y los segmentos de genes "saltadores" conocidos por moverse
al azar e introducir mutaciones. Otros conjuntos de pares de bases se
añadieron o alteraron para permitir a los investigadores etiquetar ADN
como sintético o natural y eliminar o mover genes en 'synIII'.
"Cuando se cambia el genoma se está jugando. Un cambio incorrecto puede
matar la célula -explica Boeke--. Hemos hecho más de 50.000 cambios en
el código de ADN en el cromosoma y nuestra levadura aún vive. Esto
muestra que nuestro cromosoma sintético es resistente y que dota a la
levadura de nuevas propiedades".
El esfuerzo contó con la ayuda de unos 60 estudiantes de pregrado
matriculados en el proyecto 'Construir un genoma', fundado por el doctor
Boeke en la Universidad Johns Hopkins. Los alumnos montaron fragmentos
cortos de ADN sintético en tramos de 750 a 1000 pares de bases o más, un
esfuerzo dirigido por Srinivasan Chandrasegaran, profesor de la Johns
Hopkins e investigador principal de los estudios del equipo con
'synIII'.
No hay comentarios:
Publicar un comentario